Miguel Ángel Toma declaró, creo que es diputado, que Néstor Kirchner es el Videla de estos tiempos. Nadie me lo contó, yo lo vi. ¿Qué toma Toma? ¿Desayuna con el mismo brebaje que Sylvina Walger y Elisa Carrió?
Almuerza con la señora Mirtha Legrand... Florencia de la V. La actriz, vedette y cantante (sic) travesti, cuenta que está tramitando el cambio de nombre en su documento de identidad. La morfóloga le apunta y dispara: "Pero vos te llamás Carlos". Florencia, con los reflejos de Nicolino, responde: "Si, también podría llamarme Julio". Y llega el momento estelar, ese que la tía Rosa deja fluir por el aire televisivo con la impunidad que da tanta rosa rococó rosada. "Un cuerpo tan femenino y Carlos, un nombre tan de macho".
Le Parc, Cortázar, Verne, De Vido, César, yo y tantos que en la Historia han sido, nos declaramos ofendidísimos por la discriminación nominativa de la jurásica mediática.
El nombre Rosa, pincha.
Las movilizaciones estudiantiles, las tomas de colegios y facultades son políticas, dice el gerente general de Capital Federal, y sus gerentitos.
Sí, son. Tan políticas como los presupuestos subejecutados, los nombramientos de funcionarios procesados, los derrumbes criminales, las inspecciones mal hechas, o no hechas, o negociadas, las escuchas clandestinas, las ratas estudiosas, las aulas congeladas, las provocaciones permanentes.
Sí, los pibes y las pibas hacen política, pero se educan para eso. Y se les nota. En el fondo, están lidiando con tipos maleducados y mal educados, que no es lo mismo pero es igual, como dice Silvio.
Me escribe una querida amiga ¡desde Francia! para contarme que en el Hospital Lagomaggiore, de Mendoza, los enfermos, los viejos, en fin, los pobres son mal tratados y maltratados (que no es lo mismo pero... Silvio). Vaya con la novedad. ¿Será, otra vez, la renovación de aquella campaña antiargentina que denunciaban los genocidas, esta vez con especial énfasis en jorobar funcionarios de cabotaje? Como en esa maravillosa canción de María Elena Walsh, el sistema crea pobres y enfermos, pero esta vez no regala el hospital, lo descuida.
El sistema fabrica pobres, dijimos, y los hace migrantes. Y después no sabe dónde ponerlos. En USA, capital mundial de la opulencia, aumenta la cantidad de seres humanos descartables. La pobreza también puede crecer a tasas chinas. Pero nunca falta un iluminado protonazi que encuentre la solución. Sarkozy, presidente del país ombligo de los derechos humanos, dice haber encontrado la solución a la crisis. La culpa la tienen los gitanos, como antes los judíos, los homosexuales, los masones o, vade retro, los ateos.
Sandro se revuelca en su tumba. ¡Merde, Nicolás, merde!
Querido Julito: Inspirados en los tiempos que corren nos envalentonamos y te entregamos una lista de antiguos, olvidados y nunca bien ponderados epítetos que pueden oficiar de insultos ante cualquier espécimen que ofenda tu digna humanidad. Recordemos el alegre “chichipío”, el ácido “tilingo”,el boquiabierto “paparulo” y – por supuesto – el inolvidable “chambón”. Uno que nunca debe faltar en el diccionario de todo insultador que se precie es el famoso “ortiba”. Por supuesto que tampoco debe soslayarse la categoría de “mal entretenido”. No hay que dejar en el olvido al sulfuroso “atorrante” y el punzante “gil”. Sin eludir al peyorativo “chanta”, al rioplatense “engrupido”, y el despectivo “pelandrún”. Esto nos lleva indefectiblemente a tocar el tema del vejatorio “canalla”. Con todo el respeto que nos merece la hinchada de Rosario Central, no creemos que haya que insistir en su monopólico uso. En la variedad está el gusto. Así que… aquí hay para degustar.
ResponderEliminarSalute amigo
José y Vivi